Para los que no son muy fans del brócoli, pero conocen sus maravillosas propiedades y quieren introducirlo en su día a día, les recomendamos estos muffins salados de brócoli con quinoa.
Al estar elaborados con un sabroso sofrito, podemos beneficiarnos de los nutrientes del brócoli de una manera deliciosa. Y es que el brócoli es muy rico en vitaminas A y C, en ácido fólico (por lo que es muy recomendable durante el embarazo), en fibra y en minerales como el fósforo, el potasio y, especialmente, el magnesio, el calcio y el hierro.
Su consumo se recomienda también en casos de obesidad, colesterol e hipertensión, y su riqueza en betacarotenos y en vitamina C lo ha situado como la hortaliza con mayores propiedades anticancerígenas, según estudios llevados a cabo por el Instituto Nacional del Cáncer de EE.UU.
Por otro lado, y como ya comentamos en la entrada del timbal de quinoa con calabaza, la quinoa aporta proteínas completas al contener todos los aminoácidos esenciales y completa el plato con hidratos de carbono complejos, omega 3, vitaminas del grupo B (como la B1, la B2 y la B3), vitamina E, calcio y zinc.
Estos muffins salados son muy fáciles de hacer, tienen un sabor muy agradable y como podéis ver, son muy nutritivos.
A continuación podéis ver qué ingredientes necesitáis y qué pasos tenéis que seguir para poder elaborarlos.
Grado de dificultad | Tiempo de preparación | Raciones |
Fácil | 1 h. | Para 2 personas |
Ingredientes
- 150 gr. de ramillete de brócoli
- 100 gr. de quinoa
- 200 ml. de nata vegetal para cocinar
- 1/2 cebolla
- 2 ajos
- 1 cucharadita de sal
- 1 cucharadita de pimienta
- 1 cucharadita de cúrcuma
- 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- 1 cucharada de pan rallado
- 2 cucharadas de harina de garbanzo
- 1 cucharada de zumo de limón
Preparación
- Lavamos bien la quinoa hasta que el agua salga limpia, la colamos, la ponemos en una olla con el doble de agua respecto a su volumen y la cocemos durante unos 15 minutos. Escurrimos y reservamos.
- Cocinamos el brócoli al vapor durante 5 o 7 minutos y lo reservamos también.
- Precalentamos el horno a 175º. Mientras en una sartén ponemos 3 cucharadas de aceite y, cuando éste esté templado, echamos los ajos picados y acto seguido echamos la cebolla cortada de la misma manera.
- Cuando la cebolla esté transparente, echamos la nata, la pimienta, la cúrcuma y la sal. Damos unas vueltas y añadimos el brócoli, removiendo para que éste se vaya deshaciendo. Echamos la quinoa y lo revolvemos todo bien con cuidado.
- A continuación añadimos la harina de garbanzo y el zumo de limón y damos unas vueltas para que se mezclen bien con la masa.
- En un molde apto para muffins, untamos con un poco de aceite y espolvoreamos un poco de pan rallado para evitar que la masa se pegue, lo rellenamos con ésta y lo introducimos en el horno durante 20 minutos.
- Pasado este tiempo, lo sacamos y dejamos que se templen para poder desmoldar.
Notas
- A la hora de hacer el brócoli, también se puede hervir, pero al vapor mantiene mejor los nutrientes y queda más gustoso.
- Nuestra recomendación es que el molde sea de silicona (de buena calidad), ya que son higiénicos, resisten altas temperaturas y son muy antiadherentes.
Si tenéis cualquier duda, nos la podéis dejar en los comentarios. Y si os animáis y queréis mostrar al mundo vuestras creaciones, no dudéis en etiquetarnos, ¡nos encantará verlas por las redes!
¿Nos acompañáis en las redes sociales? ¡Nos encontraréis en Facebook, Twitter, Instagram y Pinterest!