Estos canelones crudiveganos son muy fáciles y rápidos de preparar, porque una vez están bien hidratados los ingredientes, no hace falta más que mezclar y batir.
A diferencia de los canelones tradicionales que ya os mostramos en esta receta, éstos son libres de gluten, ya que las placas de pasta son sustituidas por láminas de calabacín; y la salsa consiste en una suave salsa de anacardos que añade una dosis extra de jugosidad, creando un contraste armonioso y delicado.
Pero sin duda, es su relleno lo más delicioso de esta receta, con un intenso y rico sabor que hace que las papilas se activen desde el momento en que se perciben las primeras notas del vibrante aroma que le confieren sus componentes.
Por otro lado, estos canelones, al no someterse a ningún tipo de cocción, no sólo no precisan de horno, sino que permiten aprovechar al máximo los nutrientes de sus ingredientes, los cuales, además, hacen de éste un alimento súper completo.
Y es que son muy ricos en ácidos grasos omega 3, omega 6 y omega 9, proteína, lecitina, polifenoles, betacarotenos (entre ellos, licopeno), fibra, vitaminas A, C, E y del grupo B (B1, B2, B3, B6 y B9 o ácido fólico), calcio, cobre, boro, hierro, fósforo, magnesio, sodio, potasio, yodo y zinc.
A su vez, la salsa aporta, gracias a los anacardos, un extra de proteínas, ácidos grasos esenciales omega 6, triptófano, fitoesteroles, vitaminas E y del grupo B (B3, B5 y B9 o ácido fólico), cobre, fósforo, magnesio, manganeso, potasio y selenio.
A continuación podéis ver qué ingredientes necesitáis y los pasos a seguir para poder realizar unos canelones raw y súper sabrosos.
| Grado de dificultad | Tiempo de preparación | Raciones |
| Fácil | 30 m. | Para 8 unidades |
*Más 8 horas de hidratación
Para los canelones
- 1 calabacín
- 100 gr. de nuez
- 50 gr. de tomate seco
- 1 diente de ajo
- 1/2 cebolla
- 1/2 cucharadita de comino
- 1 pizca de pimienta
- 1/4 cucharadita de nuez moscada
- 1 pizca de pimentón picante
- 1/4 cucharadita de sal
Para la salsa cremosa de anacardos
- 80 gr. de anacardos crudos
- 80 ml. de agua
- 1/2 diente de ajo
- 1/2 cucharadita de nuez moscada
- 1/2 cucharadita de sal
Preparación
- Dejamos en remojo los anacardos y las nueces durante 8 horas para hidratarlos.
- Hidratamos los tomates secos en agua muy caliente durante 20 minutos. Mientras, lavamos el calabacín, lo cortamos por la mitad y, con ayuda de una mandolina o un pelador, cortamos en láminas finas (de unos 2 o 3 mm. de grosor, y unos 8 cm. de largo, aproximadamente) cada una de las mitades. Reservamos.
- Una vez hidratados, echamos en el vaso de la picadora las nueces y los tomates secos, añadimos la cebolla, los ajos, las especias y la sal, y picamos bien hasta que quede todo bien mezclado y picado.
- Sobre una superficie limpia y lisa, colocamos 3 láminas de calabacín ligeramente superpuestas una encima de otra. Cogemos un poco de relleno con una cuchara, lo colocamos en uno de los extremos de la «placa» formada con las láminas de calabacín, y enrollamos hasta que quede un canelón bien formado. Este paso lo repetimos hasta que hayamos formado todos los canelones.
- En el vaso de la batidora, echamos los anacardos y añadimos el agua, el ajo, la nuez moscada y la sal, y batimos hasta conseguir una salsa de textura cremosa.
- Servimos los canelones en un plato, añadimos un poco de salsa sobre cada uno de ellos y, si queremos, espolvoreamos un poco de nuez picada por encima.
Notas
- A la hora de montar los canelones, lo ideal para que no se desmonten y resulte más fácil, es colocar primero la lámina del centro y, sobre ésta, colocar las otras 2 a los lados de manera que queden ligeramente superpuestas sobre ésta.
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